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ANÁLISIS | Seis apuntes sobre la destrucción de la represa Kajovka

8 de junio de 2023
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ANÁLISIS | Seis apuntes sobre la destrucción de la represa Kajovka

CONTEXTO En el marco de la agresión militar ilegal y no provocada de Rusia contra Ucrania, esta semana se dio a conocer la destrucción parcial de la represa de Nova Kajovka sobre el río Dniéper. Si bien ambos bandos se responsabilizan por el ataque, la tesis del autosabotaje ucraniano que esgrime Moscú se contrapone a un historial de ataques rusos contra infraestructura crítica del país invadido, que incluye centrales eléctricas y plantas nucleares. Todo lo anterior, dentro de la táctica de “tierra arrasada” del Ejército ruso, que no discrimina entre blancos civiles y militares, tal como se pudo observar en las recientes campañas en Siria y Chechenia.

EFECTOS CIVILES A lo largo de los 60 kilómetros de zonas inundadas, unas 40.000 personas están siendo evacuadas, de acuerdo con las autoridades de Ucrania, y si bien aún no se da cuenta de víctimas fatales, la destrucción de viviendas y bienes es cuantiosa. También se advierte de cientos de miles de hectáreas de producción agrícola que verán afectadas sus fuentes de riego, así como se interrumpirá el bombeo de agua potable para algunas poblaciones. Incluso, si los niveles de la represa siguen bajando, el suministro necesario para el enfriamiento de los reactores nucleares de la planta de Zaporiyia podría verse comprometido. De la parte rusa se advierte posibles efectos en el acceso a agua potable para la anexada península de Crimea.

EFECTOS MILITARES Cuando la ofensiva de primavera boreal de Ucrania empezaba a dar sus primeros indicios con operaciones militares en el flanco sureste, ya se estima que las inundaciones van a retrasar o dificultar, pero no detener, futuras acciones. En especial, se complicarán desembarcos fluviales, puesto que el Dniéper se ha convertido en una frontera de facto para las fuerzas beligerantes. La represa misma era uno de los pocos pasos habilitados para cruzar entre ambas orillas. Asimismo, es evidente que la situación también va a afectar a las posiciones rusas ribereñas. 

LEGISLACIÓN INTERNACIONAL ¿El válido atacar una represa desde el punto de vista del Derecho Internacional Humanitario? El artículo 56 del Protocolo Adicional I (1977) de la Convención de Ginebra, que busca reducir los impactos de los conflictos, establece que los trabajos o instalaciones que contengan “fuerzas peligrosas, como diques, represas y plantas eléctricas de generación nuclear” no deben ser atacados, aún si son considerados objetivos militares, porque la liberación de esas “fuerzas” va a causar un perjuicio mayor a la población afectada.

Ahora bien, así como lo anterior establece responsabilidades para los atacantes en un conflicto armado, también existen para los defensores. El artículo menciona excepciones, como el hecho de que las instalaciones no se estén ocupando para el fin por el cual fueron creadas, que estén siendo empleadas como bases o que su control sea indispensable y necesario para cumplir propósitos netamente bélicos, transformándolas en objetivos militares. Lo anterior, representa las excepciones que podrían ser argumentadas por un atacante. No obstante, ninguna aparenta ajustarse al caso de lo ocurrido en Nova Kajovka.

OBJETIVO MILITAR Lo anterior nos lleva a preguntarnos entonces, ¿qué es o no es un objetivo militar? El artículo 52 del Protocolo Adicional I de los Convenios de Ginebra establece que objetivo militar son “aquellos objetos que por su naturaleza, ubicación, finalidad o utilización contribuyan eficazmente a la acción militar o cuya destrucción total o parcial, captura o neutralización ofrezca en las circunstancias del caso una ventaja militar definida”. Ahora, ¿Cualquier ganancia táctica justificaría la denominación de objetivo militar? Por supuesto que no. Así como la presencia de civiles no inhibe el uso de fuerza letal (Ejemplo: una fábrica de munición operada por civiles que contribuye al esfuerzo de la guerra), la determinación de un objetivo militar está dada por la importancia y beneficio que su control o destrucción otorgue al adversario. En consecuencia, si no se evidencia dicha relación o esta resulta débil y el sufrimiento de civiles es desproporcionado —como parece ser el caso—, no es posible establecer o evidenciar la existencia de una necesidad de dañarlo. De esta manera, la supuesta contribución que dichos bienes representan para las acciones militares y las ventajas que podrían ofrecer deben, claramente, justificar la afectación de civiles. De lo contrario, su ejecución se torna ilegal e ilegítima.

ATAQUES EN LA HISTORIA Durante la Segunda Guerra Mundial los aliados atacaron represas tanto para privar de energía eléctrica a la industria militar alemana, los bombardeos británicos sobre el río Ruhr, como para detener el avance de los nazis en Ucrania, la voladura de Dneprostroi que hicieron los soviéticos sobre el Dniéper.

En el marco de las guerras en los Balcanes, tropas serbias intentaron volar la represa de Peruca en 1993, pero un rápido contrataque de fuerzas croatas impidió que cumplieran su objetivo, junto con la intervención decidida de un oficial británico adscrito a Naciones Unidas.

Equipo AthenaLab
8 de Junio de 2023

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